Buenas Nochecitas :)

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Nadie puede evitar conmoverse al ver la imagen de un pequeño koala que no dejó a su madre en ningún momento tras un accidente. Él escaló a la mesa quirúrgica en la que su madre estaba siendo operada tras un accidente y la abrazó.

Lizzy, una koala adulta, tuvo que ser intervenida luego de que fuera atropellada en una carretera de Australia. Junto a ella estaba su bebé, Phantom, pero afortunadamente resultó ileso.

Los veterinarios los rescataron y los llevaron al hospital animal Wildlife Warriors Worldwide. Un gran gesto de amor sorprendió a todos en el centro cuando el cachorro, de seis meses y solo 420 gramos, cubrió con sus brazos a su madre mientras los profesionales operaban su pulmón.

Según informó el centro a través de su página web, en un momento ellos quisieron retirarlo, pero Phantom se aferró a ella. La cría estuvo escalando hasta su espalda y acariciándola con su pequeña pezuña.

Tras la operación, Lizzy se está recuperando bien y su cría continúa a su lado en todo momento. “Lizzy se está recuperando”, dijo unas de las enfermeras.

La institución atiende alrededor de 70 koalas al mes, recibe unas 100 llamadas de emergencia diarias que resultan en el traslado de unas 30 especies diferentes. El hospital gasta en estos animales cerca de 4 mil dólares al mes.